Los amortiguadores de tu auto son indispensables para la seguridad cuando manejas. No solo sirven para aumentar la comodidad mientras conduces, sino que también sirven para soportar la carga, establecer una altura óptima, y ofrecer estabilidad y adherencia del neumático al asfalto.
Sin embargo,están sujetos a desgaste, y esto puede exponer a los conductores y pasajeros a diferentes riesgos al conducir. Es por esto que se debe conocer cómo funcionan y cómo elegir el amortiguador adecuado.
¿Cómo funcionan y cuáles son los tipos de amortiguadores? Los amortiguadores disminuyen el impacto de las oscilaciones que tiene el auto durante la marcha. Aunque todos cumplen este objetivo, hay distintos tipos:
Amortiguadores hidráulicos: son los más comunes en el mercado y consisten en un cilindro cargado de aceite que circula sobre un pistón, trasladando este líquido gradualmente a la otra cavidad del cilindro.
Amortiguadores a gas: además de contener aire, sus cámaras están cargadas de gas de nitrógeno, lo que permite que el fluido circule de forma eficiente sin formar burbujas y mantiene los neumáticos en contacto con el piso a pesar de las irregularidades.
Ahora que ya sabes qué son y cómo funcionan, cabe preguntarse: ¿cómo elegir el amortiguador adecuado?
Según el tipo de vehículo: Los amortiguadores están fabricados para modelos específicos de automóviles y su tipo de uso en particular: algunos soportan mayores cargas de peso y otros mejoran tu comodidad.
Según el uso y las condiciones viales: antes de adquirirlos, debes evaluar el uso cotidiano que le das a tu auto.
Según la calidad de la marca: debes asesorarte en cuanto a la durabilidad y eficiencia de la marca, ya que todos los fabricantes cuentan con diferentes estándares de elaboración por los que se mide su calidad.
Importante: ¿Cuándo cambiar los amortiguadores? Si detectas pérdidas de aceite en los amortiguadores, cuando notes que tu vehículo hace cabeceo al momento de frenar, sentir golpeteos en la zona del amortiguador durante el desplazamiento del vehículo, Si notas desigualdad en el desgaste de los neumáticos, al percibir una constante vibración en el volante.
